La Unidad de Ataque Cerebrovascular del Hospital de Clínicas ha sido catalogada por el Ministerio de Salud Pública como centro de referencia nacional para el tratamiento de estas enfermedades y en la formación de recursos humanos en esta área de la neurología.
Es la única en el sistema de salud nacional que tiene un neurólogo de guardia interna 24 horas cada día. Esto es de suma importancia pues las técnicas que se utilizan para resolver los ataques se denominan “tiempo dependiente”. Significa que existe un tiempo determinado para realizarlas de forma eficiente desde que se manifiesta el síntoma en el paciente y finalmente llega a asistirse. Existen protocolos para responder de forma inmediata y coordinada para dar respuesta frente a un ACV.
¿Qué es un ACV?
Es un enfermedad del cerebro causada por un problema en la circulación de la sangre que lo nutre. La forma más frecuente de ACV es el isquémico. Sucede cuando el cerebro sufre la falta de oxígeno, ya que el flujo de sangre no llega debido a una obstrucción en la arteria. Otro tipo, menos frecuente, se lo denomina ACV hemorrágico, sucede cuando la arteria se rompe y la sangre inunda el cerebro provocando lesiones en él.
Tratamientos
La técnica de trombolisis intravenosa se utiliza frente al ACV de tipo isquémico, consiste en inyectar un medicamento para disolver el coágulo que está tapando la arteria. Se la puede utilizar en un determinado número de pacientes, porque en su mayoría exceden el tiempo desde ocurrido el accidente para utilizar esta técnica. Fue introducida por primera vez en el Hospital de Clínicas en el 2010 y actualmente es allí en donde se realiza a 3 de cada 4 pacientes del sistema público de Montevideo y cercanías. Este centro tiene la mayor casuística del país en trombolisis.
La trombectomía mecánica es una técnica de alta tecnología y alto costo que se utiliza cuando el coágulo que obstruye la arteria es muy grande y no puede disolverse con medicación. Se realiza dentro de un equipo denominado angiógrafo. Introduciendo un dispositivo que navega por las arterias del cuerpo y llega con un catéter hasta la arteria tapada dentro del cerebro, se captura el trombo y se lo extrae mecánicamente. Esta técnica se utiliza para un grupo muy seleccionado de pacientes que constituyen los ACV isquémicos más graves.
Este procedimiento se realiza únicamente en el hospital universitario dentro del sistema público.
La atención de los pacientes en la Unidad de ACV es un tratamiento en sí mismo. Estas demostraron disminuir las muertes por ACV, así como las secuelas luego del mismo. A diferencia de las dos técnicas antedichas, que se utilizan para un subgrupo de pacientes, todos los pacientes con ACV pueden beneficiarse de las unidades de ACV, por lo que el impacto es muy grande.
La Unidad de ACV es pionera y única en el país con más de 1600 pacientes asistidos desde 2007.
¿Se puede prevenir un ACV? ¿Cómo se manifiesta?
Si bien existen factores de riesgo conocidos como la edad, hipertensión, tabaquismo, diabetes, etc, el ACV puede afectar a cualquier persona y cualquier edad.
Se deben considerar algunos síntomas que requieren una rápida consulta en emergencia pues podrían ser indicadores de encontrarse frente a un ACV: falta de fuerza o falta de sensibilidad en una mitad del cuerpo (cara, brazo o pierna), dificultad para expresarse o comprender las palabras, problemas del campo visual (imposibilidad de ver para el lado derecho como para el lado izquierdo), dolor de cabeza muy intenso y sensación de estallido que aparece bruscamente, problemas de coordinación (pérdida de equilibrio)
Todos estos síntomas comparten la característica de manifestarse de forma brusca y abrupta. No es algo que se pueda arrastrar en el tiempo.